Lamentablemente, en muchos lugares del país la presencia de los grupos criminales atemoriza a cientos de familias que ante el miedo y las amenazas, ceden a las presiones de los delincuentes. Esto le sucedió a una familia que vivía en el barrio Enciso El Pinal, en la ciudad de Medellín, pues un grupo armado criminal que opera en la zona los estaba extorsionando y amenazando porque su hijo no quiso unirse a la banda.
Con acompañamiento de la Policía Metropolitana de Medellín la familia tuvo que sacar todos sus objetos de la vivienda y retirarse de esa zona de la ciudad ante el miedo de que los delincuentes cumplieran con sus amenazas. Sin embargo, antes de irse, las autoridades también capturaron a cinco integrantes de este grupo criminal y los enviaron a la cárcel.
Extorsión a la familia por parte de los criminales
El núcleo familiar había llegado a ese barrio, ubicado en el oriente de la capital antioqueña, a inicios de este año. La bienvenida por parte de los delincuentes a la nueva familia fue informarles que debían pagarles $60.000 quincenales para que pudieran estacionar su carro en la vía pública de la zona.
Luego de esto, el pasado 12 de enero, según los datos recopilados por los investigadores de la Fiscalía, los delincuentes retuvieron ilegalmente al hijo de la familia durante dos horas, esto para presionarlo a que se uniera al grupo armado. “Uno de los miembros de la familia fue retenido durante dos horas, tiempo durante el cual le ofrecieron trabajar para la organización criminal cargando ‘jugueticos’ y otras cosas”, explicó Natalia Rendón, directora de la Seccional Medellín de la Fiscalía.
Como el joven se negó a ‘trabajar’ junto a los delincuentes, estos lo dejaron libre pero amenazaron con atentar contra él y su familia.
Entonces, el pasado 2 de febrero, “los mismos hombres habrían abordado al padre de la víctima y exigido 5 millones de pesos como multa porque su hijo se negó a colaborar con la organización”, detalló la funcionaria de la Fiscalía. Ese mismo día la familia les dio parte del dinero, pero las presiones de los delincuentes fueron tales que la familia decidió acudir a las autoridades y desalojar la vivienda.
“Un mes después de su llegada, la familia completa se tuvo que desplazar del barrio con el acompañamiento y protección de servido del Gaula de la Policía”, se lee en el comunicado del ente investigador.
Artículo tomado de: Infobae
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Escritor: Rubén Darío Lozano Gómez
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