Una de las legumbres es la soja, que ha demostrado ser muy saludable y se ha utilizado en muchas culturas durante miles de años.

Legumbre del mismo grupo que las judías, desarrollada a partir del gineceo, que produce un único carpelo con dos valvas y semillas situadas en una fila posterior a la sutura. Las vainas son carnosas, rectas y por lo general, de forma recta.

Existe una gran variedad en la parte de la legumbre que se utiliza en la alimentación de los animales y de los seres humanos. Por lo general, la parte comestible coincide con la parte que se utiliza para almacenar sustancias de reserva. Esta variación es consecuencia de las diversas estrategias de adaptación que utilizan las legumbres para adaptarse a condiciones ambientales muy diferentes.

Composicion

Los alimentos a base de soya generalmente contienen entre un 20% y un 25% de proteína; sin embargo, el maní y la soja pueden contener hasta un 38% de proteína. Por esta razón, los agricultores utilizan ampliamente las semillas de leguminosas para aumentar el contenido de proteínas de los piensos concentrados para aves, cerdos y conejos.

Aunque las legumbres no pueden proporcionar todos los aminoácidos esenciales, forman un grupo especial en los alimentos vegetales comparable a los cereales. De hecho, las legumbres son un complemento de los cereales porque aportan lisina y se puede compensar la falta de lisina.

Como señala el sitio web de Levante, la soja es rica en proteínas de alta calidad y vitaminas B y E, así como en grandes cantidades de hierro, calcio, fósforo, potasio y zinc. Tiene una historia de unos 5000 años en China.

Lo que hace que sea un súper alimento son los flavonoides que contiene, que pueden reducir el colesterol y prevenir el cáncer.

Durante y después de la menopausia, también beneficia la salud del corazón, los antioxidantes, el apoyo a la glucosa y el mantenimiento de los huesos.

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Otra web: rubendariolozanogomez.com

Por: Rubén Darío Lozano Gómez

Escritor: Rubén Darío Lozano Gómez