Dairo Antonio fue detenido en la mañana del 23 de octubre, luego de evadir a las autoridades a través del principal grupo armado ilegal del país durante muchos años. Hace unos años, era miembro del clan del golfo.

Las autoridades llevan muchos años buscando a Dairo Antonio. El pasado sábado 23 de octubre, militares, policías, fiscales y oficiales de inteligencia se unieron en la Operación Agamenón para lograr su objetivo: capturar a Darío.

Comienzos

Según muchos investigadores, la Tribu del Golfo, al igual que la Fundación Paz y Reconciliación, es la organización armada ilegal más grande de Colombia. Nació en Turbo (Antioquia) e inició su carrera en el extinto Ejército Popular de Liberación.

El enlace mencionado por InsightCrime en el artículo indicaba que luego de la fusión de Acci con las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), Otoniel fue puesto bajo la orden de Daniel Rendón Herrera, alias Don Mario.

Durante el mes de agosto del año siguiente, Otoniel permaneció en los registros oficiales como paramilitar con acceso a la justicia transicional judicial, pero en ese momento tenía el alias de Cachama.

Aunque se retiró del sistema de transición, Otoniel no participó en ningún procedimiento de litigio. Casi 10 años después de que bajó las armas por segunda vez, su ausencia provocó que fuera expulsado del sistema de transición.

Aunque el gobierno de Duke desplegó una de las mayores operaciones militares de los últimos años para encontrar su paradero: Agamenón, tras años de búsqueda, Otoniel fue capturado.

Un alto funcionario del Ministerio de Defensa afirmó que el líder de la tribu del Golfo es una de las mayores amenazas del país porque se convirtió en distribuidor de microempresas, lo que ha desencadenado constantes conflictos entre otros grupos ilegales e incluso provocado masacres.

Incluso la Administración de Control de Drogas está dispuesta a ofrecer 18 mil millones de dólares para arrestarlo, a pesar de que ha estado tratando de negociar su rendición o desmovilización con las autoridades durante muchos años.

Esta promesa nunca se ha cumplido, desde el viernes pasado, el Ejército, la Policía y la Fiscalía lo mantienen en cuarentena en la zona rural de El Totumo en Necoclí, Bahía de Urabá.

Además, ya tiene seis condenas en su contra y se espera que esta noche sea extraditado a Estados Unidos por un juez de Bogotá, donde será trasladado. Existen dos solicitudes de extradición en su contra.

Sitio Web: Ruben Dario

Otra web: rubendariolozanogomez.com

Por: Rubén Darío Lozano Gómez

Escritor: Rubén Darío Lozano Gómez